Cuando estaba en sexto grado me quedé en casa de una amiga a quien no veía hace muchos años, así que decidimos hacer todo lo que hacíamos de pequeñas para revivir los viejos tiempos. Incluso bañarnos juntas. Al principio no pensé nada malo porque todavía era inocente, pero cuando la vi desnuda creo que mi inocencia desapareció. No tuvimos sexo (obvio) pero nos tocamos mucho ya sin la misma inocencia de antes.